Plasmodium

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Plasmodium es un protozoo parásito intracelular obligado perteneciente al filo Apicomplexa y a la familia Plasmodiidae. Es el agente causante del paludismo o malaria, una enfermedad potencialmente mortal de distribución mundial, con especial incidencia en regiones tropicales y subtropicales.

Características clínicas:

El paludismo es una enfermedad febril aguda. Los síntomas aparecen tras un periodo de incubación que varía entre 7 y 30 días, dependiendo de la especie. Se caracteriza por episodios cíclicos de fiebre alta, escalofríos, sudoración profusa, cefalea, mialgias, náuseas y vómitos. En los casos graves, puede causar anemia severa, insuficiencia renal, edema pulmonar, alteraciones neurológicas (malaria cerebral) y, si no se trata, la muerte.

Las especies que infectan al ser humano son principalmente Plasmodium falciparum, P. vivax, P. ovale, P. malariae y P. knowlesi. De ellas, P. falciparum es la más letal y frecuente en África subsahariana, mientras que P. vivax predomina en Asia y América Latina. Las recaídas pueden producirse especialmente con P. vivax y P. ovale, debido a la activación tardía de hipnozoítos hepáticos latentes.

La transmisión se produce principalmente mediante la picadura de la hembra del mosquito Anopheles infectada, aunque también puede ocurrir por transfusiones de sangre, trasplantes, uso de jeringas contaminadas o transmisión vertical (de madre a hijo).

Diagnóstico:

El diagnóstico de la malaria se basa en la detección del parásito en sangre periférica, mediante tinción con Giemsa y observación microscópica de frotis sanguíneo (gota gruesa y extendido). También se utilizan técnicas rápidas de diagnóstico inmunocromatográficas (RDTs) y PCR en contextos específicos.

Es importante identificar la especie de Plasmodium y el nivel de parasitemia para guiar el tratamiento adecuado y valorar el riesgo de complicaciones.

Tratamiento:

El tratamiento depende de la especie implicada, la gravedad del cuadro y la zona geográfica (por la resistencia a fármacos). En casos no complicados, se utilizan combinaciones con derivados de la artemisinina (ACTs). P. vivax y P. ovale requieren además primaquina para eliminar los hipnozoítos hepáticos y evitar recaídas.

En la malaria grave, el tratamiento de elección es la artesunato intravenoso, seguido de tratamiento oral completo.

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