Yersinia enterocolitica

  • Yersinia enterocolitica

Yersinia enterocolitica es una bacteria gramnegativa de la familia Yersiniaceae, perteneciente al género Yersinia. Es un cocobacilo no esporulado, aerobio o anaerobio facultativo, móvil a 22 °C gracias a flagelos peritricos, aunque pierde esta movilidad a 37 °C. Tiene una cápsula fina, presenta pili y fimbrias, y muestra una gran capacidad de adaptación ambiental, siendo capaz de crecer en un amplio rango de temperaturas (-1 °C a +40 °C), incluso en refrigeración. Metabólicamente, es catalasa positiva, ureasa positiva, fermenta glucosa y sacarosa, y es oxidasa negativa.

Características clínicas:
Yersinia enterocolitica es uno de los agentes causales de la yersiniosis, una zoonosis entérica que, aunque menos frecuente que otras enterobacterias, tiene gran importancia clínica, especialmente en Europa. La yersiniosis se transmite principalmente por consumo de agua o alimentos contaminados (especialmente carne de cerdo cruda o mal cocida, leche sin pasteurizar o vegetales contaminados), o por contacto directo con animales infectados, incluyendo cerdos, roedores y mascotas.

La infección puede presentarse como una enterocolitis aguda autolimitada, con síntomas como diarrea (a veces con sangre), fiebre, dolor abdominal (frecuentemente en fosa iliaca derecha), náuseas y vómitos. Esta localización puede simular una apendicitis, especialmente en niños. Otras manifestaciones incluyen adenitis mesentérica, ileítis terminal, y necrosis hemorrágica ileocecal. Las complicaciones postinfecciosas incluyen artritis reactiva y eritema nodoso.

En pacientes inmunocomprometidos, ancianos o neonatos, Y. enterocolitica puede causar septicemia grave, con evolución sistémica potencialmente mortal.

Diagnóstico:
El diagnóstico de yersiniosis se basa en el aislamiento del microorganismo en cultivos de heces, sangre o ganglios linfáticos. Debido a su crecimiento óptimo a temperaturas bajas, puede requerirse incubación en frío (4 °C) para facilitar su recuperación. Los medios de cultivo selectivos y las técnicas serológicas o moleculares (como PCR) permiten una identificación más rápida y específica.

Tratamiento:
En la mayoría de los casos, la infección por Yersinia enterocolitica es autolimitada y no requiere tratamiento antibiótico. En casos graves o sistémicos, o en personas con comorbilidades, se emplean antibióticos como cefalosporinas de tercera generación (por ejemplo, ceftriaxona), fluoroquinolonas (ciprofloxacino) o aminoglucósidos. La resistencia antibiótica es poco común pero debe monitorizarse.

La yersiniosis es una zoonosis de importancia creciente y requiere medidas de prevención adecuadas como la correcta cocción de alimentos, higiene alimentaria y control sanitario de los productos animales.

Productos relacionados