Streptococcus pneumoniae
Streptococcus pneumoniae, también conocido como neumococo, es una de las principales causas de infecciones bacterianas en humanos a nivel mundial. Es el agente etiológico más común de la neumonía adquirida en la comunidad (NAC), responsable de aproximadamente 1,5 millones de muertes al año, especialmente en niños menores de 5 años y adultos mayores. Se estima que coloniza de forma asintomática entre el 5-10% de los adultos y hasta el 60% de los niños, especialmente durante los meses fríos.
Características clínicas
S. pneumoniae es un diplococo grampositivo encapsulado, alfa-hemolítico, inmóvil, catalasa-negativo y sensible a la optoquina. La cápsula es el principal factor de virulencia, con más de 90 serotipos descritos, aunque aproximadamente 12 causan la mayoría de los casos de enfermedad invasiva.
Este microorganismo forma parte de la microbiota normal de la nasofaringe humana, pero puede provocar diversas infecciones cuando invade otros tejidos. Las manifestaciones clínicas más comunes incluyen otitis media, sinusitis, neumonía, bacteriemia y meningitis. Las infecciones invasivas son más frecuentes en niños pequeños, ancianos, personas con enfermedades crónicas o inmunocomprometidas. En contextos de hacinamiento (cuarteles, residencias), ciertos serotipos pueden causar brotes.
La transmisión ocurre por vía respiratoria a través de gotas de saliva o secreciones nasales. Aunque rara vez genera epidemias amplias, el neumococo es un patógeno de alto impacto clínico y sanitario.
Diagnóstico
El diagnóstico de infección neumocócica depende del sitio afectado. Puede incluir hemocultivos, cultivo de esputo, pruebas antigénicas en orina (para detectar polisacárido capsular), PCR, o análisis del líquido cefalorraquídeo en casos de meningitis. La identificación en el laboratorio se apoya en su morfología (diplococos en forma de lanceta), alfa-hemólisis en agar sangre, sensibilidad a optoquina y lisis por sales biliares.
Tratamiento
El tratamiento se basa en antibióticos, aunque la resistencia a penicilina y macrólidos es creciente en muchas regiones, por lo que se recomienda realizar pruebas de sensibilidad. Las vacunas neumocócicas (conjugadas y polisacáridas) han reducido significativamente la incidencia de enfermedad invasiva. Existen esquemas de vacunación para niños, adultos mayores y personas con factores de riesgo (inmunodeficiencia, enfermedades crónicas, tabaquismo, etc.).