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Measles

El sarampión es una de las enfermedades virales infantiles más comunes en todo el mundo. Aunque la introducción de la vacuna ha limitado la aparición de epidemias, se describen brotes epidémicos en poblaciones vacunadas. El éxito parcial de la vacunación ha hecho que el diagnóstico de la enfermedad sea más difícil y a la vez más importante. Las complicaciones más importantes de la enfermedad son la encefalomielitis y la panencefalitis esclerosante subaguda. Los niveles máximos de anticuerpos aparecen a las 2 semanas del rash y a las 4 semanas de la vacunación; posteriormente los niveles de IgG descienden hasta los seis meses.

Características clínicas: El sarampión es una enfermedad respiratoria causada por un virus. La enfermedad y el virus que la causa tienen el mismo nombre. Al sarampión también lo llaman rubéola.

El sarampión es muy poco frecuente en los países y regiones del mundo donde se mantiene una alta cobertura de vacunación. En América del Norte y del Sur, Finlandia y algunas otras áreas, se cree que la trasmisión endémica del sarampión se ha interrumpido gracias a la vacunación. Todavía se presentan casos esporádicos de sarampión en los Estados Unidos, debido a que los visitantes de otros países o los ciudadanos estadounidenses que viajan al exterior pueden infectarse antes o durante su viaje y transmitir la infección a personas que no han sido vacunadas o no tienen inmunidad.

El virus del sarampión se multiplica, por lo general, en las células que recubren la parte de atrás de la garganta y los pulmones. El sarampión provoca fiebre, secreción nasal o moqueo, tos y erupción en todo el cuerpo. El sarampión se propaga a través del aire al respirar, toser o estornudar. Es tan contagioso que lo más probable es que cualquier niño que ha estado expuesto al virus y no tenga inmunidad contraerá la enfermedad.

Diagnóstico: El diagnóstico del sarampión por vía de laboratorio se puede hacer mediante la confirmación de anticuerpos para el sarampión IgM, o el aislamiento del RNA del virus del sarampión desde especímenes respiratorios. La observación de "Manchas de Koplik" y fiebre es también un diagnóstico de sarampión.

Tratamiento: No hay un tratamiento específico o terapia antiviral para el sarampión sin complicaciones. La mayor parte de los pacientes con sarampión sin complicaciones se recuperarán con descanso y tratamiento de ayuda.

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